Algunas películas chilenas que son como el traste, pero igual salvan

Nota: Esta es una columna de realidad-ficción, sobre todo ficción. Tómesela con humor (o con Armonil).

Sí, mi titular es un oxímoron, pero en este periodo de Fiestas Patrias vienen a mi muchos recuerdos de cuando TVN y uno que otro canal más daban maratones de películas chilenas antiguas, tradición que hace tiempo que fue sustituida por el relleno sin par de los malditos matinales. Por eso hoy les haré un conteo de aquellas películas, en su mayoría horrendas, pero que en estos tiempos tienen un valor nostálgico.

1-      Ayúdeme Usted Compadre

Germán Becker hizo esta película sin historia, que pasa por un compilado de un Zona Latina de hace 45 años, pero que se pueden apreciar algunos paisajes de Santiago y el resto de Chile. Para alguien joven como servidor, esas imágenes impactan para bien, pero hay que ser francos, la película es tan rancia que ni los cameos de Sergio Livingstone y Don Francisco salvan. Aunque siendo justos, las escenas de Los Perlas resultan ser algo simpáticas.

2-      Azul y Blanco, El Nominado y otras similares.

Casi todas las películas posteriores a la dictadura  tienen escenas de actrices muy lindas, sin ropa y a lo hippie. El resto son guiones malos, con finales extraños, y casi todas se tratan de lo mismo. ¿Cuál es el afán de hacer tantos desnudos en el cine? ¿Será que le quieren hacer competencia al Cine Nilo?

3-      Las películas de Jodorowsky

Si bien este personaje suele hacer películas en el extranjero, las cuento porque al fin y al cabo están hechas bajo la visión de un chileno. Y si mi argumento es inválido y no quiere pescar para nada esta alternativa, pues se perderá de un cine bizarro y poco entendible, que es más disfrutable mientras mayor sea el consumo de drogas durante la proyección.

 4-      Las películas de Sebadilla, Nicolás López y similares

Hablar de las películas chilenas cómicas (tan cómicas que no hacen reír a nadie) sonaría a repetir lo mismo que los demás, así que es mejor ser original y tratar de encontrarles un punto a favor (no fue fácil), por ejemplo, la mayoría de las chiquillas con las que trabaja son lindas, ehhhh….., bueno, las actrices son lindas y…este….bueno, si no hay nada mejor que ver, es una opción pasable, gracias a las actrices. Un real punto a favor, es que Nicolás López al menos intenta superarse (la palabra clave es intenta).

5-      Las películas de Dictadura

A mi juicio sólo existen dos películas ambientadas en esa época que me gustan: “Machuca” de Andrés Wood, y “No” de Pablo Larraín, aunque esta última se mande sus buenos anacronismos que me resultan muy molestos. El resto son películas muy, pero muy similares, pero al igual que las de los directores antes mencionados, son una opción por si no hay nada mejorcito. Aunque no son muy recomendables si usted es de derecha, en ese caso mejor vea la primera que puse en la lista y grite: ¡Viva Chile!