Nota: Esta es una columna de realidad-ficción, sobre todo ficción. Tómesela con humor (o con Armonil).

Las nuevas generaciones se desesperan cuando descubren en los medios algo que no sea porno o reggaetón. Pocos jóvenes saben que era Sábado Gigante, pero los más viejitos (de 20 años en adelante) nos conocemos al derecho y al revés aquel programa y su gran animador, Mario Kreutzberger, más conocido como “Don Francisco”.

Aquí en mi nueva sección “Perfiles” abordaré los hechos más importantes de su vida. Para usted, Don Francisco, este humilde homenaje:

- Mario Luis Kreutzberger González nació en Chillán en el año 1920 A.Y. (Antes de Yeruba) en un lindo hospital de la zona. La machi que lo atendía dijo que la cabeza era lo más difícil de sacar del vientre de la madre, y por fortuna, había sobrevivido.

- Marito creó el programa Show Dominical, que duró dos capítulos, puesto que el entonces dueño del Canal 13 dijo que su cabeza no cabía en la pantalla chica. Un día "sábado" unos niños le gritaron que tenía la cabeza "gigante", y ahí nació el nombre de su nuevo show.

- El apodo de “Don Francisco” se originó porque nadie sabía pronunciar correctamente su nombre, pues a la gente de aquel entonces le costaba decir “Mario”.

- Don Francisco conoció al Chacal de la Trompeta, cuando era conocido como el Chacal de Nahueltoro. Don Francisco le enseñó a leer, escribir y a tocar la trompeta. Luego de 50 años juntos, lo fusilaron.

- Don Francisco se casó con su amiga de la infancia, Teresita Reyes, y tuvieron 7 hijos: Gruñón, Tontín, Tímido, Doctor, Feliz, Estornudo y Stitch.

- Los sombreros que utiliza Don Francisco en la sección del Chacal de La Trompeta pudieron ser vistos desde la luna en 1969, casi tapando la mitad superior de la Gran Muralla China.

- Don Francisco también fue guionista de los sketches de Sábado Gigante. Los más recordados fueron: Los Valverde, Los Venegas, Los Veganos, Los Italo-peruanos, Los Semáforos y Los Indolatinos.

- Por último, se dice que Don Francisco creó la famosa Teletón para ayudar a muchos niños discapacitados y que había sacado la idea de un sueño que tuvo luego de probar el LSD que le había convidado Mandolino.

Gracias, Don Francisco, por todo lo que nos ha entregado. Siga creando cosas que le gusten a las personas y quédese con la gente que lo respetamos (¡Deme platita por favor!).