“Alto el fuego” de la ETA

11 Abril 2006
El mensaje esperado desde hace tiempo se resume en cuatro palabras: “Alto el fuego permanente”.
Viviana Meneses >
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El mensaje esperado desde hace tiempo se resume en cuatro palabras: “Alto el fuego permanente”. A partir de las 00:00 horas del 24 de marzo se inicio el proceso de rendición de la ETA. Han sido meses de rumores mitigados por atentados contra empresarios, el incremento de los ataques de Kale borroka, la muerte de dos presos, la convocatoria de una huelga general y comunicados sin mención alguna sobre un posible fin de la violencia. Han sido fines de semana esperando las redacciones de los medios de comunicación sobre una noticia que nunca llegaba. Cuando partidos y y en general cada individuo, representados por una única y cerrada opinión pública que ha sido acallada durante años por su gobierno, para no realizar ningún tipo de provocacioneagentes sociales advertían sobre el riesgo de que las esperanzas acabaran por frustrarse, llegó el comunicado de ETA.

El pasado 22 de marzo la banda terrorista ETA, a través de tres voceros encapuchados, presentó a la opinión pública española, francesa y mundial un comunicado oficial que da claros indicios de ser diferente al entregado por la misma banda el 16 de septiembre de 1998. En aquella ocasión la organización terrorista explicó y analizó la situación política y el momento histórico en el que se encontraba España. Además de esto añadía ocho puntos con numerosas condiciones, entre ellas dar pasos eficaces, para crear una situación única y soberana que acogiera a los territorios de la Comunidad Autónoma Vasca, Navarra y el País Vasco francés. Pedía de esta manera que las fuerzas favorables promovieran acuerdos y dinámicas y que se acabara con los partidos, estructuras institucionales y represoras que tienen por objetivo la edificación de España y Francia.

En 1998, ETA puso límites a la que se entendió como una declaración de “tregua indefinida”. La organización expresó su intención de “una suspensión ilimitada de sus acciones armadas, limitándose únicamente sus funciones a las tareas habituales de suministro, mantenimiento de las estructuras institucionales que la componen y su derecho de defensa en hipotéticos enfrentamientos”.
Por el contrario, en el comunicado difundido hace unos días se ha anunciado un “alto el fuego” y, además, especifica que es “permanente”.
Sin embargo, en los últimos años, en tres ocasiones adicionales ETA ha anunciado un alto el fuego, hace dos años anunció una tregua en Cataluña tras de que el líder de Ezquerra republicana de Cataluña, Carrod Rovira, tuviera una entrevista con miembros importantes de la banda terrorista en territorio francés y, poco tiempo después, el grupo armado que significa en castellano Tierra Vasca y Libertad pronunciara otra tregua que sólo afectaba a políticos.

Durante cuarenta años los terroristas vascos han impuesto su propia ley en España. Esto a pesar de tres amnistías excepcionales (1975, 1976 y 1977) y que el “país” Vasco a logrado una enorme autonomía política. Esto pareciese no importar mucho o al menos no bastar para ETA que ha seguido matando y ha seguido luchando, contradictoriamente en cuanto a lo que quiere lograr, contra la democracia.

Frente a esto gran parte de los actores de la vida social y política española han mostrado gran optimismo. Pero si vamos más allá de esta simple y obvia apreciación podremos ver que hay gran parte de la población, española y mundial que conserva ese dejo de incredulidad propio de las dudas que genera una situación como está ya que claramente los interlocutores que entregaron el mensaje no son los más confiables. Muchos seguramente deben estar pensando, que este alto el fuego que ahora nos anuncian es una pausa, no es una renuncia a la actividad criminal. Supone, pues, reafirmar su voluntad de seguir existiendo, no se arrepiente de nada y no pide perdón a las victimas del terrorismo, siendo está última acusación la más grave de todas. Es algo así como lo hecho, hecho está y de aquí en adelante todo será distinto. De nuevo, nos dicen que el objetivo es iniciar un proceso que conduzca a lo de siempre, que sus exigencias son completamente necesarias y que todo pasa por el derecho de autodeterminación, además, de nuevo, nos imponen las mismas condiciones de todo el tiempo.

Más allá de la opinión que tienen los partidos políticos y en general cada individuo, representados por una única y cerrada opinión pública que ha sido acallada durante años por su gobierno para no realizar ningún tipo de provocaciones a este grupo armado (que desde 1968 ha asesinado a 851 personas), en todo el territorio español, esto no pareciese causar gran impacto a nivel gubernamental.

El gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero encontró el apoyo parlamentario para iniciar un diálogo con ETA pero con la condición expresa de que la banda terrorista abandone definitivamente las armas.

A pesar de todo lo anterior, hay que esperar que este anuncio de los encapuchados blancos sea realmente un definitivo paso a la entrega de las armas y el cese de la fuerza bruta, la violencia y el chantaje como medio para imponer su modelo de nación.

Comentarios

Imagen de Héctor González

Señor, mi Dios, haz que

Señor, mi Dios, haz que tanto en Irlanda,
como en las tierras vascas, reine la paz,
el amor y la concordia,
por Jesucristo Nuestro Señor, Amén.

Imagen de Claudio Martínez Molina

pero ojo estos grupos

pero ojo estos grupos separatistas en el mundo aparecen en demanda de autonomia de territorios que se dejan al olvido o que no se ven representados por la autoridad central... el centralismo hace daño señores....ojo!

PD. obvio ke el terrorismo no es el camino!

Imagen de Héctor González

Asi es, amigo Marcelo, tanto

Asi es, amigo Marcelo,
tanto los de la ETA como los del IRA,
son terroristas,
solo que los primeros son vascos
y los del IRA son de Irlanda.

Imagen de Marcelo Contreras

Que bien.....primero fue IRA

Que bien.....primero fue IRA y ahora ETA....los milagros existen