Carlos Ibáñez del Campo en su primer mandato nombró un ministerio que la prensa bautizó como el de “los orangutanes ebrios”. Jorge Alessandri designó a su primer gabinete con escasa participación del mundo político, y de inmediato ese ministerio fue conocido como “el gabinete de los gerentes” y hasta un diputado conservador –partido que apoyaba al gobierno– lanzó una protesta en las páginas de El Diario Ilustrado.
Gabriel González Videla fue un as para formar y cambiar absolutamente a sus colaboradores. Empezó gobernando con un ministerio integrado por comunistas y derechistas, pero a las pocas semanas a los comunistas los marginó y empezó una “razzia” tremenda contra militantes de esa colectividad. En el gabinete, los cargos abandonados, contra su voluntad por el PC fueron llenados por dos conservadores “tradicionalistas” y al terminar su mandato, realizó un tercer giro ministerial llamando al mundo social cristiano.
El primer gabinete del presidente electo Sebastián Piñera se caracteriza por el regimiento de ingenieros, que se apoderó de importantes carteras.
La segunda característica es que la mayoría de los ministros hizo sus estudios en la Universidad Católica y muchos con postgrados en planteles universitarios de los Estados Unidos. Aparecen algunos prominentes “chicago boys” que en otro tiempo, no tan lejano, fueron artífices de la economía chilena.
Otra característica del diseñado ministerio es la carencia de personeros relevantes de los partidos Renovación Nacional y UDI. Al parecer ese ministerio lo conocieron por adelantado los jefes de ambos colectividades que formularon declaraciones algo críticas respecto del predominio del mundo tecnócrata en desmedro del mundo político, que quedó representado por cuatro ministros de cada uno de los dos grandes partidos de la Alianza. Chile Primero quedó marginado del gabinete.
Da la impresión que el ministerio ha sido hecho a imagen y semejanza del Presidente electo. Los partidos políticos no tuvieron injerencia mayor y los principales líderes políticos no acudieron al acto de presentación en el Museo Histórico en la plaza de Armas.
No estuvieron presentes Andrés Allamand, Pablo Longueira, Evelyn Matthei, Jovino Novoa. A su vez, nombres que circularon como posibles integrantes del Gabinete quedaron en la sala de espera como Marcelo Forni, el diestro internacionalista Sergio Romero y muchos más.
Incluso parlamentarios que asistieron no se veían contentos. Caso por ejemplo de los senadores Lily Pérez y Francisco Chahuán, ambos de Renovación Nacional.
La figura política más destacada del gabinete, por sus años de actividad fue Jaime Ravinet quien media hora antes del acto de presentación renunció a la Democracia Cristiana en la que militó por 49 años.
La prensa escuchó a diez ministros los que pronunciaron “mini-discursos” sin profundizar nada. Los periodistas enfrentaron al nuevo Canciller Alfredo Moreno Charme, quien dijo que anuncios propios del Ministerio de Relaciones Exteriores los dará a conocer después de asumir su cargo el próximo 11 de marzo, pero adelantó que la prioridad será América Latina y especialmente los países vecinos.
De los 22 ministros seis son mujeres, cuatro pertenecen a la UDI y un número igual a Renovación Nacional. Es Ena Von Baer, de 35 años de edad, quien fue candidata a senadora por la Región de Araucanía. En el primer cómputo, entregado por el Ministerio del Interior se le dio como ganadora, pero en el transcurso de la noche de la elección del pasado mes de diciembre fue derrotada por su compañero de lista el RN José García Ruminot.
A pesar de ciertos rumores no hubo nombramientos de congresales en ejercicio.
No había dudas que Ministro del Interior sería Rodrigo Hinzpeter abogado de 43 años de edad y quien durante la campaña apareció como el vocero del candidato. Hinzpeter demuestra en toda intervención una lucidez muy clara y una mente muy ordenada. Se entiende que será un buen Ministro del Interior siguiendo la senda de otros compatriotas que destacaron en esas funciones como el Dr. Sótero del Río en el anterior gobierno de la derecha.
Jaime Ravinet de La Fuente
La única gran sorpresa, fue el nombramiento de Jaime Ravinet de la Fuente, abogado de 63 años de edad como nuevo Ministro de Defensa. Por segunda vez en su vida fue contactado cuando estaba de vacaciones en Pucón, y desde allí dio el “sí”.
Lo mismo ocurrió durante el gobierno del presidente Ricardo Lagos quien dialogó para ofrecerle el cargo, y de inmediato un avión de la Fuerza Aérea lo trasladó desde el sur para jurar como Secretario de Estado en la misma cartera de Defensa. En aquella oportunidad el presidente de la DC Ricardo Hormazábal declaró a la prensa, que “el señor Ravinet no representa en el gabinete a la Democracia Cristiana” porque no se había consultado a ese personero dicha designación.
Ahora para evitar malos entendidos Ravinet renunció media hora antes de asistir a la ceremonia en el Museo de Historia a la militancia en la Democracia Cristiana. Cuando se rumoreaba la posible designación, un personero de la directiva de la Democracia Cristiana declaró que al anunciarse su designación sería expulsado de la DC, cosa a la que se adelantó el propio Ravinet, aclarando que lo hizo ”con un dolor profundo”. Jaime Ravinet fue en su juventud Presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile.
Ocupó un cargo importante en la campaña presidencial de Patricio Aylwin en 1989. Fue el verdadero generalísimo de aquel candidato, luego fue designado por el propio Aylwin alcalde de Santiago y posteriormente cuando se modificó la Constitución fue elegido en el mismo cargo por abrumadora mayoría. Recientemente dictó un curso sobre Defensa en los Estados Unidos. Como político es quizás el más experto de todo el gabinete.
Joaquín Lavín
Para muchos fue sorpresa conocer el nombramiento de Joaquín Lavín en el Ministerio de Educación. Se pensaba en un cargo social o Mideplan, pero no en educación, un ministerio muy conflictivo por la efervescencia estudiantil y por algunos problemas como la deuda histórica con los profesores. Al hablar brevemente el pasado martes 9 de febrero, dijo que estaba contento con el nombramiento, pero no se veía feliz. Lavín puede realizar una gran labor, porque el tema de educación lo conoce. Además la UDI insistió ante el Presidente electo Sebastián Piñera designar en un ministerio relevante a Lavín, quien perdió su postulación senatorial en Valparaíso. Se estima que será un buen ministro, si logra pasar con éxito frente a un sector muy polémico.
La Cancillería y Hacienda
La designación del Ingeniero Industrial Alfredo Moreno Charme fue la segunda gran sorpresa, pues no tenía antecedentes sobre ese Ministerio, pero es un hombre de buen criterio. Fue presidente del Directorio de la antigua Radio Minería y de la revista Ercilla. Es el actual director de Falabella y en los últimos años ha tenido intensa actividad empresarial. Tiene un postgrado en Chicago.
Llamó la atención la claridad que demostró tener el nuevo Ministro de Hacienda Felipe Larraín quien reiteró ideas del programa del presidente electo cuando habló ante la prensa como grandes desafíos: recuperar capacidad de crecimiento del país; crear nuevos empleos; incentivar ayuda a las Pymes. Agregó que había terminado en Chile la transición política y ahora venía la transición económica. Dijo que respetará plenamente a los derechos de los trabajadores y que se hará una política pro-sindicatos.
Finalmente hizo un llamado a la Concertación para respaldar los proyectos en beneficio de las grandes mayorías del país.
Repercusiones políticas
Ni en la UDI ni en Renovación Nacional hubo entusiasmo por el nuevo gabinete. Naturalmente que los jefes de ambos partidos declararon “para el público” que el ministerio era sólido y bien afiatado. Sin embargo, la procesión “va por dentro”. En Renovación Nacional hubo sorpresas por la exclusión del actual senador Sergio Romero en el Ministerio. En la UDI hubo molestia, que por cierto no se expresa en forma pública, por la marginación del actual presidente de la Cámara de diputados Rodrigo Álvarez Zenteno.
En la Democracia Cristiana no solo hubo molestias por la designación de Jaime Ravinet, sonó a verdadera indignación.
¿Cuánto durará este Ministerio?
El Presidente en una parte de su discurso se refirió a “este primer gabinete”, pero observamos que en los últimos 20 años los gabinetes han tenido cierta durabilidad en el tiempo lo que contrasta con otros períodos de nuestra historia en que era normal que los ministros fuesen cambiados por lo menos 18 veces en apenas cinco años.
Por ahora, se advierte que el nuevo gobierno ha ganado a la opinión pública, pero en esto siempre hay que recordar una frase que le oímos en una oportunidad al recordado senador Raúl Juliet: “La señora popularidad, es una dama muy veleidosa…”.
Y eso, es absolutamente cierto.