Si bien era un día bastante helado para la Región de Ohiggins, esto no detuvo a los manifestantes que paralizaron el tráfico de más de 6 kilómetros de camiones en la carretera de La Fruta.

Eran cerca de las 10 de la mañana del martes 28 de junio, a la altura del cruce de Las Cabras, cuando un grupo numeroso de agricultores muy organizados instalaba sus camiones y tractores, cerrando el paso de la carretera de La Fruta ¿El motivo?, manifestar su repudio ante la posible instalación de la termoeléctrica de la empresa Fibroandes.

Minuto a minuto se fueron sumando más de 500 personas y tres alcaldes (de Pichidegua, Las Cabras y Peumo). El Comité en Defensa del Medio Ambiente portaba en sus manos una declaración donde solicitaba: “este 'hito' es el comienzo de nuestras acciones hasta que el Gobierno y el Presidente de la República, el señor Sebastián Piñera,  nos dé una solución concreta y retire de una vez por todas, el proyecto termoeléctrico” añadiendo “¡Somos un territorio puramente agrícola! Poseemos uno de los 25 mejores suelos del mundo. Generamos más de 15 mil puestos de trabajo.”

Asimismo, se solicitó la presencia del Intendente, de lo contrario la paralización seguiría. Así fue como la Gobernadora de Cachapoal concurrió al lugar y mantuvo conversaciones con las autoridades locales y manifestantes, lográndo que el edil regional los recibiera en su oficina a las 15 horas.

Al reunirse con el Intendente, Patricio Rey, se acordó que cada 15 días se reunirían para realizar un monitoreo al proyecto, hecho que permitió que luego de 9 horas de manifestaciones, la comunidad agrícola liberara la carretera.

¿Esto termina aquí?

Es cierto que el diálogo por el diálogo o los acuerdos no calmarán la molestia de los agricultores, hecho que se debe tener en cuenta, ya que son la comunidad más potente e importante de la zona ¿Qué esperan ellos que suceda? La suspensión del proyecto contaminante. ¿Cómo podrían ser de utilidad las reuniones quincenales? A través de un espacio que posibilite informar a los servicios públicos sobre el tema desde un ámbito técnico.

Si bien existe confianza en el ambiente, los hechos aquí son necesarios. Este tipo de luchas no están en contra de la energía o de las empresas, sino de las políticas y del marco legal que permiten plantas contaminantes más allá de un sello ERNC. Hoy es Pichidegua y mañana quién.

Muchos preguntan surgen como:¿cuánto tiempo tendrá este proyecto para mejorar las más de 94 observaciones realizadas por los servicios públicos?, ¿cuántas veces el proyecto termoeléctrico deberá ser observado por el SEA?, ¿qué credibilidad se le está dando a la comunidad en este tema?

Más 500 manifestantes ¿serán personas desinformadas?

La empresa comunica que la comunidad está desinformada ¿Cuáles son las acciones que la empresa ha utilizado para informar? Los vecinos comentan que sus prácticas van enfocadas hacia la realización de eventos de “donación”, donde los habitantes se han opuesto tajantemente por saber el origen e intención de la actividad. Entonces, cuál es el objeto de hablar de desinformación.

¿Cuáles son las acciones concretas de información qué ha realizado el equipo técnico que se opone al proyecto? La comunidad ha contado con la información de expertos como el prestigioso toxicólogo de la Universidad de Chile, Andrei Tchernitchin, de Eduardo Giesen de la organización internacional GAIA, del Premio Nacional de Ciencias Exactas, Servet Martínez, del reconocido meteorólogo, Adolfo Cortés, más diversos ingenieros entendidos en temas ambientales ¿Podemos pensar que existe una comunidad desinformada?

Más preguntas. Si un proyecto energético que pertenece a la clasificación de “Energía Renovable No Convencional” por el sólo hecho de no utilizar combustibles fósiles (petróleo, carbono), se ve en la necesidad de responder dos veces a las observaciones realizadas por los servicios públicos a su Declaración de Impacto Ambiental, ¿es posible que sea una propuesta óptima en términos ambientales?

Tratar de desinformada a la ruralidad chilena es una técnica comunicacional muy antigua y de paso, da cuenta de un mensaje sin contenido sobre los vecinos que se oponen. Ayer fueron 500 los manifestantes, más tres Alcaldes, pertenecientes a Pichidegua, Las Cabras y Peumo, a ello se suma la concurrencia de dos diputados, Alejandra Sepúlveda y Javier Macaya, más la Gobernadora de Cachapoal en representación del Intendente. Es posible pensar que este movimiento pertenece a un “grupo de vecinos” que no saben por qué protestan.

¿Cómo están consideras este tipo de planta de biomasa -como la que desean instalar en Pichidegua- por expertos internacionales? La Academia de Familia de Médicos de Carolina del Norte señala que sus emisiones  generan partículas que aumentan el riesgo de muerte prematura, de asma, de bronquitis crónica y de enfermedades cardíacas, esto a partir de una planta ubicada en el Estado de Carolina del Norte, EEUU ¿Quién desinforma? ¿Quién miente?

Sólo el agricultor que ha sembrado durante toda su vida en este valle sabe la amenaza que significa una termoeléctrica, sabe que quedará sin trabajo o sustento para su familia y lo que es peor, sabe que el sentido de “su vida” será arrebatado por 35 MW de electricidad ¿Es posible ponernos en sus zapatos por un momento?