La Región cuenta con el primer Santuario de la Naturaleza Marino en la comuna de Navidad

La Región cuenta con el primer Santuario de la Naturaleza Marino en la comuna de Navidad

01 Marzo 2013
Este martes 26 de febrero se publicó en el diario oficial el decreto que declara al “Bosque de Calabacillo” ubicado al sur de la bahía de Navidad, como el primer Santuario de la Naturaleza Marino de la región y del país.
Comunicado >
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Dicha declaración se fundamenta en que el sector presenta una alta biodiversidad asociada al único bosque de la macroalga Macrocystis pyrifera(calabacillo), localizado en una zona de libre acceso, además de tener un alto valor científico por sus componentes bióticos, bajo conflicto en términos de uso, gran riqueza cultural por las formas tradicionales de extracción de algas, belleza escénica, interés turístico y potencial productivo, dado su capacidad de funcionar como “fuente de semillas” de recursos marinos.

 “Esta es una muy buena noticia para la conservación de la biodiversidad de nuestra región” señaló el Seremi de Medio Ambiente, Felipe Avendaño Pérez, agregando que “esto demuestra la prioridad que tiene para el Gobierno de Sebastián Piñera el cuidado de nuestros recursos naturales”.

 Cabe destacar que esta es la primera área protegida de la región desde el año 1996, siendo además el primer Santuario de la Naturaleza Marino del país que presenta como objeto de conservación un bosque de algas.

 De acuerdo a lo informado por Avendaño, el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad revisó los antecedentes durante al año 2012 y encontró argumentos suficientes para declarar a esta área de 11 hectáreas como Santuario de la Naturaleza.

 

La propuesta para la declaración nació del trabajo de la Ilustre Municipalidad de Navidad, el Sindicato de Trabajadores Independientes de Pescadores Artesanales Unión La Boca (STIPA La Boca), el Sindicato de Trabajadores Independientes de Pescadores Artesanales Unión Matanzas (STIPA Matanzas) e investigadores de la Estación Costera de Investigaciones Marinas de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

 BONDADES DE UN AREA PROTEGIDA

De acuerdo a la legislación vigente, un Santuario de la Naturaleza es todo sitio terrestre o marino que ofrezca posibilidades especiales para estudios e investigaciones geológicas, paleontológicas, zoológicas, botánicas o de ecología, o que posea formaciones naturales, cuya conservación sea de interés para la ciencia o para el Estado.

 Desde la perspectiva ecológica y de gestión ambiental, la creación de Áreas Protegidas en el Borde Costero de la Región permite extender los sectores destinados a la preservación de la naturaleza en la ecorregión marina denominada araucana, que es una porción del territorio marítimo nacional, que abarca desde la Región del Lib. Gral. Bernardo O’Higgins hasta la Región de los Lagos. 

 Respecto a los desafíos que impone la declaración, el seremi señaló que  aún se deben tramitar los permisos administrativos y autorizaciones sectoriales para la concesión y manejo del sector de playa, colindante al Santuario de la Naturaleza., además de diseñar programas de manejo para el desarrollo de la Investigación, Turismo y Pesca Sustentable, del mismo modo se debe validar el  Plan de Administración del Santuario de la Naturaleza, asimismo definir mecanismos de financiamiento para su gestión, además de proponer y convenir usos preferentes compatibles con la conservación de esta área protegida, en el contexto de la Planificación de Usos Preferentes para el Borde Costero.

 ZONA TURÍSTICA

Navidad es una comuna litoral por excelencia, posee aproximadamente 30 kilómetros de costa y un gran porcentaje de su población vive del mar, ya sea por la actividad pesquera o turística.

 Para el Seremi de Medio Ambiente, “el hecho de conservar este territorio marino traerá como consecuencia la protección efectiva de los recursos presentes en el área, los cuales pueden ser utilizados de forma indirecta en actividades relacionadas a la educación ambiental, divulgación científica y actividades turísticas”.

 “Además -agregó-  se potenciarán muchos sectores del área, como la desembocadura del río Rapel y del estero Navidad, que concentran una gran diversidad de flora y fauna, lo que facilitará el desarrollo de actividades educativas, turísticas o de esparcimiento, así como también el turismo de intereses especiales como la observación de aves, flora y paisaje, entre otras”.

 La zona cuenta con grandes extensiones de dunas lo que aumenta su valor paisajístico. La baja intervención humana y la belleza escénica del sector, posibilitan la definición de productos turísticos como rutas y paseos, además de la práctica de deportes náuticos extremos.