A pesar de que la pizza es conocida en todo el mundo como un emblemático platillo italiano, la palabra pizza en realidad viene del griego, concretamente del vocablo pēktos, que significa sólido. En sentido amplio, podría decirse que la primera pizza fue alimento de los griegos, que cubrían su pan, llamado plakous, con aceites, ajo, cebolla, quesos y hierbas, aunque explorando más ampliamente en la historia encontramos que diferentes preparaciones que consistían en algún tipo de pan con otros ingredientes añadidos para darle sabor datan incluso del neolítico. 

Sin embargo, la primera pizza en usar este nombre surge, en efecto, en Italia. Los italianos solían -y suelen aún- comer un pan plano, cubierto con otros ingredientes y conocido como focaccia. Sin embargo, los primeros en añadir tomate a la focaccia fueron los habitantes de Nápoles, y es por esto que se considera que, en realidad, la pizza tiene su origen en esta ciudad, a finales del siglo XVIII, como una comida para pobres que era vendida en la calle y no en restaurantes.

La pizza fue evolucionando e incorporando distintos ingredientes, siendo emblemática por ejemplo la creación de la pizza margarita, hoy considerada quizá la forma más clásica de pizza en el mundo, y que fue inventada en 1889 en honor de la reina Margarita de Savoy, teniendo como ingredientes el tomate, la mozzarella y el orégano para representar los colores de la bandera nacional italiana.

Curiosamente, hasta finales del siglo diecinueve o comienzos del veinte, la pizza era un plato dulce, no salado. Es con este tipo de preparaciones, que comienzan a incorporar ingredientes como mozzarella, tomates, anchoas y hongos, que la pizza comienza a convertirse en lo que es hoy día. Es en esta misma época cuando la pizza comienza su expansión por el mundo gracias a la migración italiana a América, se populariza y comienzan a incorporarse otros ingredientes, como la piña, que fue utilizada por primera vez en la pizza en Canadá, a manos de un cocinero griego. Así, hoy día la pizza es uno de los platillos más consumidos en todo el mundo, y cada país cuenta con sus propias variaciones e ingredientes favoritos: mientras que Argentina, Uruguay y Paraguay prefieren una clásica y sencilla pizza de muzzarella, en Colombia se inclinan por la más exótica pizza hawaiana, y Chile prefiere el pepperoni.

La enorme versatilidad de este platillo permite que, aún siglos después, se siga innovando en los ingredientes y preparaciones que incluye, dando lugar a curiosas alternativas como la pizza de sushi, popular en Panamá, mientras que conserva su sitio de honor como la gran favorita para compartir con amigos y familiares, tanto en un restaurante como desde casa. Así, al mismo tiempo que los restaurantes y cadenas de pizza continúan incorporando nuevos ingredientes y recetas, también se esfuerzan por ofrecer alternativas como la entrega a domicilio, como ha hecho Jhot Pizza a través de su alianza con PedidosYa. En la actualidad, la pizza es el alimento por excelencia para pedir a domicilio, como demuestran miles de escenas de la cultura pop, la televisión y el cine: y es que habiendo tantas opciones y posibilidades, es la comida perfecta para adaptarse a los gustos de distintas personas, y que todos puedan comer un trozo.