Hace mas de 2 semanas el ministro de Desarrollo Social, Joaquín Lavín, dio a conocer hoy el nuevo bono de Asignación Social, destinado a dar un apoyo adicional a las familias más vulnerables. Este corresponde a una cifra de $10.000 por cada integrante de la familia durante el mes de noviembre.

En palabras del ministro "Más de 541 mil personas se verán beneficiadas con este nuevo bono de Asignación Social que entregaremos durante el mes de noviembre. De esta forma, 143 mil familias involucradas en este programa recibirán 10 mil pesos por cada uno de sus integrantes".

Junto con lo anterior, el Ministerio anunció el inicio del levantamiento de terreno de la Encuesta Casen correspondiente al presente año, el cual se extenderá entre octubre y enero de 2012.

Estas medidas despertaron alarma en algunos sectores de oposición, sobre todo al coincidir la entrega del bono con la medición de encuesta. En efecto, indican que este bono puntual podría significar subestimar la pobreza en un 1%, es decir, 170.000 personas que artificialmente saldrían de esta situación.

Según indicó Marco Enríquez-Ominami del Partido Progresista ”sin cuestionar la importancia de la ayuda a las familias más vulnerables del país, resulta preocupante la entrega de un subsidio en periodo de levantamiento de información, relativa al ingreso de los hogares, puesto que puede afectar la medición de la pobreza e indigencia del país, queremos que éste bono sea para los más pobres y no para el gobierno”.

El economista Camilo Lagos, agrega que “es sabido que la Casen es el instrumento con el cual se efectúan las mediciones de pobreza y desigualdad, entre otras estadísticas y, por lo tanto, es un insumo fundamental para el diseño e implementación de las políticas públicas y sociales de Chile. Para el cálculo de estas medidas, el cuestionario aplicado incluye preguntas relacionadas al ingreso de las personas, las cuales son utilizadas para el cálculo del ingreso total”.