La portabilidad númerica comenzará a operar desde este lunes y traerá beneficios a los usuario de teléfonos celulares, que podrán mantener su número, aunque decida cambiarse de compañía.

Las proyecciones indican que el primer año sólo entre un 10% y un 15% de los usuarios migraría de compañía telefónica, llegando a 25% en el segundo año. La persona que podrá ejecutar un proceso de portabilidad será el titular de la cuenta, aunque para ello debe tener canceladas todas las deudas por concepto de servicios. Sólo así la compañía donante podrá liberar la combinación numérica que quiere ser portada.

Si usted es uno de los millones de chilenos que usan la modalidad de prepago, deberá enviar un SMS a la compañía donde quiere cambiarse (portarse en la jerga técnica) y luego de ser aceptado, deberá concurrir a la sucursal de la nueva empresa con su cédula de identidad y en horas el proceso se cierra.

Si es dueño de un plan y que está asociado a un teléfono que la empresa le ha entregado pues primero que todo deberá consignar que usted si planea cambiarse de empresa, deberá cancelar toda deuda que tenga con la empresa actual. Necesariamente deberá concurrir presencialmente a la "nueva" empresa móvil para que ésta previa evaluación comercial de sus antecedentes, le otorgue un plan similar (o quizas mejor).

Aun así, se da por descontado que la portabilidad cumplirá con la promesa de introducir mayor competencia al mercado, y de mejorar la relación compañía-cliente, pero no necesariamente redundará en precios sustancialmente menores, ya que los operadores no están dispuestos a desangrarse en guerras de precios, sobre todo cuando ya tomaron la decisión de absorber ellas mismas el costo de los $377 que costará cada cambio de compañía. Para los analistas, la portabilidad mejorará sobre todo el servicio al cliente.