"No hemos hablado de baja", "los precios están acorde al mercado" o "es que antes no se ganaba nada" son algunas de las explicaciones que dan "a boca de urna" colectiveros y micreros cuando se les consulta sobre el por qué no han disminuido sus tarifas toda vez que el precio de la bencina está a $200 menos que cuando se subió el tarifario.

Las proyecciones del petróleo hablan de que el precio se mantendría en dichos niveles. Es más, el mismo Ministro de Energía, Marcelo Tokman, ha manifestado que "no se volverá a los precios altos" de hace un tiempo. Puede bajar un poco más, incluso, y si llega a haber un alza sería insignificativa (del orden de 3 a 5 pesos promedio). Entonces, ¿por qué no se transpasa dicha disminución a nuestro trasporte público?.

Ya hace casi 2 meses hablamos sobre esta situación en el diario y le preguntamos a la gente, siendo mayoritaria la voz de bajar las tarifas, aún cuando en esa época la bencina era más cara que hoy. La curva descendente del precio de los combustibles se ha ido produciendo desde hace ya 8 meses aproximadamente, y desde esa fecha hasta hoy han sido muchos los productos que han bajado sus precios, incluso los taxis en Santiago regularon sus tarifas y en varias ciudades ya lo han realizado.
Si a ello le sumamos que Rancagua tiene una de las bencinas más caras de Chile (aún nadie ha sabido contestar certeramente la razón) y por consiguiente uno de los pasajes de locomoción colectiva más altos, esto se transforma en algo insostenible. Sólo como ejemplo, resulta insólito que un colectivo del recorrido Illanes mantenga una tarifa de $450 aún cuando es el más corto de Rancagua, comprendiendo apenas desde mujica por el sur hasta, generalmente, Circunvalación por el norte (quizás un poco más allá, pero la diferencia es mínima).
Los precios actuales ($350 y $450 de micros y colectivos respectivamente) hacen pensar en una mala voluntad por parte de los gremios en acceder a reducir las tarifas artificiosamente mantenidas arriba, donde las ganancias líquidas para dueños y conductores se están transformando en excelentes sueldos, usufructuando del bolsillo y la capacidad económica del peatón.

Ojalá que esta nueva baja haga entrar en conciencia al gremio, toda vez que se avizora que el panorama se mantendrá o mejorará. De esta forma podremos bajar nuetro costo de vida en un año que se ve será difícil y austero.
Y tú, ¿qué piensas de esta situación?, ¿estás conforme con las tarifas o las bajarías?
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