En Chile existen más de 400 mil temporeros, de los cuales la mitad son mujeres. Lamentablemente, es sabido que las jornadas de trabajo en este oficio se encuentran entre las más duras y extensas de nuestro país, muchas veces superando las 15 horas diarias. Si a esto le sumamos las malas condiciones laborales nos encontramos frente a una penosa ecuación. Sin embargo, esto podría cambiar debido al proyecto que presentó esta semana la Comisión de Agricultura de la Cámara Baja, de la mano del diputado PRSD Alejandro Sule.

Este proyecto permitirá a los temporeros realizar negociaciones colectivas, acceder a algún tipo de sistema de previsión social, acceso a programas de capacitación laboral y a una mayor seguridad en el trabajo. La idea principal del documento es que los trabajadores de temporada - que se ocupan de la selección, cosecha, limpieza, control de calidad de frutas, flores, semillas y hortalizas entre otras- puedan exigir que se les respeten sus derechos laborales estipulados en la legislación vigente.

Según estadísticas de la Red Chilena Contra la Violencia Doméstica y Sexual, en un informe sobre la realidad de los trabajadores de la fruta, el 50% de los temporeros no cuentan con un contrato de trabajo. El pago de sus remuneraciones se realizan a través de oscuros y poco transparentes tratos sólo de palabra. Según el diputado esto no es algo nuevo. “Muchos de ellos sufren por el trato indigno por parte de sus patrones y por la falta de higiene, de agua potable o de baños en los mismos predios en los cuales cosechan. Hasta se han dado casos, como en la sexta región, de mujeres obligadas a trabajar encadenadas”, agregó el legislador.

El diputado culminó indicando la necesidad urgente de reglamentar esta actividad. “Se debe exigir respeto por los trabajadores del campo, por sus derechos humanos y laborales y ser enérgicos en reclamar los derechos de cada trabajador que se encuentra en los campos de Chile y un documento como este podría ser un primer paso para ello”, sentenció.