Debido a este notable aumento en los requerimientos de electricidad, es que se hace imperiosa la necesidad de ir actualizando no solo aquellas partes que apreciamos a simple vista, sino que también lo que contituye el cableado de la instalación.
Los conductores eléctricos son la parte de la instalación por donde circula la electricidad, por lo tanto, son fundamentales a la hora de pensar en una ampliación o un mejoramiento eléctrico.
Según algunos entendidos en el tema, este recambio de los conductores y artefactos eléctricos, debería producirse cada 7 o 10 años, en consecuencia que acá en Chile hay casas con alambrados que datan de más de 20 años, los cuales revisten un alto peligro para sus moradores.
¿Cuál es ese peligro?
Normalmente los conductores están diseñados para trabajar con electrodomésticos, en condiciones normales, entonces ahí viene el problema 1, cuando la persona conecta más de un consumo alto al mismo enchufe, por ejemplo, un hervidor y una plancha, los alambres van calentándose (por efecto del paso de la corriente), hasta que la aislación se derrite y se produce un cortocircuito o una fuga a tierra.
Si los conductores están trabajando más allá de la capacidad para la que fueron fabricados, pueden producir un incendio, lo que es muy grave.
En la actualidad se están fabricando conductores y tuberías con materiales aislantes y retardantes a la llama, además que se adecúan a las necesidades que un hogar moderno requiere.
Para finalizar, recuerden que no basta con que las cosas se vean bonitas exteriormente, sino que también tengan un respaldo de calidad por el interior, esto vale para todo orden de cosas.
En otra ocasión veremos como cuidar la energía eléctrica en el hogar. Hasta luego.