Sabiamente este dicho no nos indica con que prioridad han de cumplirse: es éste un desafío que plantea la disyuntiva de darnos "al trabajo" de plantar, "la acción" de escribir, o "la labor" de tener. Lo cierto es que cada una de ellas demanda responsabilidad, madurez y compromiso que no se adquieren de la noche a la mañana... por eso.. es aún una tarea pendiente.
No obstante si reflexionamos respecto de las tres, nos damos cuenta que el árbol ha sido una compañía constante a lo largo de nuestras vidas, basta rememorar cuántos libros se han escrito bajo sus copas, cuántos niños han trepado a sus ramas y cuántos enamorados han grabado sus tú y yo en sus troncos.
Curioso es entonces pensar que el árbol es dignificado apenas hace 166 años, y es que aún cuando no hablen ni se muevan, son seres vivos con ciclos biológicos y existen en el planeta mucho antes que el hombre levantase su frente y caminase en dos pies.
El Día del Árbol o Día Forestal Mundial es consecuencia de la toma de conciencia de la importancia de este recurso para el desarrollo de la humanidad y su hábitat, siendo Suecia el primer país del mundo en instituir un día en su honor.
Esto ocurrió en 1840, cuando en dicho país se reconocieron los cuidados que se les debe brindar y la necesidad de introducir a los niños desde temprana edad en el conocimiento y práctica de una tarea de por vida.
Por su parte, Canadá llegó aún más lejos cuando el 21 de agosto de 1860 adoptó la hoja del arce o maple (árbol de singular belleza y buena madera para la construcción) como emblema nacional pasando a ser el centro de la bandera y del escudo de armas.
Pronto la iniciativa cobró fuerza en otros países del continente y del mundo que calendarizaron un día para reflexionar respecto del respeto que les debemos puesto que:
• Tienen derecho a la vida, porque también nacen.
• Tienen derecho a ser protegidos y a gozar de luz, agua, aire, espacio.
• Tienen derecho a no ser dañados por lo que todo lo que ponga en peligro su vida es un asesinato (fogones, incendios de reservas o parques).
• Tienen derecho a cumplir su ciclo, siendo la tala indiscriminada una forma de vulneración. Si la tala es necesaria, tienen derecho una plantación equivalente en el mismo lugar.
• Tienen derecho a crecer. Destruirlos siendo pequeños y sin haberse reproducido atenta contra la especie e, indirectamente, contra nosotros mismos.
En Chile, el “Día del Árbol” se conmemora cada 28 de Junio con actividades tales como paseos botánicos, homenajes escolares y plantaciones de especies, muchas de ellas impulsadas por el Gobierno a través de la Corporación Nacional Forestal, CONAF, organismo encargado de la legislación forestal y comprometido con el cuidado de la flora y fauna.
FLORA NATIVA DE LA VI REGIÓN
El bosque nativo es un ecosistema natural cuyos árboles son especies originarias que se han generado espontáneamente y tienen la capacidad de desarrollarse en forma pura o mixta (en asociación con otras especies).
A nivel local, CONAF Región de O’Higgins ha identificado una vegetación variada, en la que se pueden distinguir claramente 3 tipos de bosques:
• Bosque Esclerófilo, caracterizado porque la mayoría de las especies son de hojas duras (Quillay, Boldo, Peumo, Litre, Espino, Maitén, entre otras).
• Bosque Caducifolio, caracterizado porque la mayoría de las especies pierden sus hojas en invierno (Roble y Hualo).
• Matorral y Bosque Espinoso, caracterizado por una gran diversidad de vegetación. Predominan los arbustos de hojas duras, resistentes al calor y al aire seco.
Asimismo, CONAF VI Región ha distinguido varias especies nativas con problemas de conservación clasificándolas en: peligro como la Avellanita, el Eriosyce Aspillagae y el Belloto del Sur; vulnerables como el Ciprés de la Cordillera, el Belloto del Norte, el Hualo, el Tayú, la Palma Chilena, el Lingue del Norte, el Pacul, la Llaretilla y el Guayacán y en especies raras entre las que se menciona la la Paramela de Puangue, la Huillipatagua, el Maitén del Chubut, el Linacillo, el Arrayán de Colchagua, el Petrillo y el Arrayán de Hoja Roja.
Especies como éstas pueden encontrarse en la Reserva Nacional Río de los Cipreses (ubicada en la comuna de Machalí), en el sector Sierras de Bellavista (en San Fernando), en la Reserva Nacional Roblería del Cobre de Loncha (administrada por CONAF VI Región) y en el Parque Nacional Palmas de Cocalán (de carácter privado), así como también en plazas, parques, calles o en sectores naturales silvestres de la región.
La defensa de los bosques y sus árboles demanda trabajo...a cambio la naturaleza sabiamente recompensa con frutos, sombra y aire puro. Un árbol plantado es un ser nuevo que no existía antes de que nos diéramos al trabajo de hacerlo. Al final, la vida es una perfecta sucesión de labores, acciones y trabajos...
Marcela A. Garrido Isla
OIRS
CONAF Región de O’Higgins