Por Eliana Jiménez
En el verano de 1948 fue inaugurada la llamada medialuna monumental de Rancagua, toda de madera, con capacidad -en ese entonces- para 6 mil personas, y que se constituyó lejos en la más grande de todas las existentes en el país. Con aportes de privados y gracias a una ayuda considerable de la Braden Cooper Company –hoy Mineral El Teniente- se levantó el escenario a orillas de la avenida España, en “las afueras” de la ciudad, hoy casi pleno centro Los propios socios del Club de Rodeo de Rancagua plantaron los eucaliptos que aún se conservan.
¿Qué tuvo de especial este monumental escenario? Que por su capacidad y ubicada en el valle central del país podía ser sede de un Champion de Chile de Rodeo, esto es, el que congregara a todos los ganadores de los diferentes rodeos que durante la temporada –de agosto a abril- se hacían a lo largo de Chile. De ahí su nombre original de Champion de Champions, esto es, Campeonato de Campeones.
Era el más grande escenario al aire libre existente en provincias al punto que allí actuó, a tablero vuelto, Bill Halley y sus Cometas.
El primer Champion de Champions fue en Rancagua y desde esa vez se inició una rotación de sede que incluyeron a San Fernando, otra vez Rancagua, Chillán, Curicó, Los Andes, Melipilla, Chillán, Osorno, Melipilla, Maipú por dos veces consecutiva, Los Angeles, Linares, Ovalle, San Fernando, Valdivia, Rancagua en dos ocasiones seguidas, Osorno, Talca, nuevamente Rancagua en dos oportunidades para terminar su itinerancia en Talca en 1974.
A partir de 1975, ya con la medialuna de Rancagua ampliada para recibir a 9 mil personas y reforzada con gruesos cables de acero, el Champion de Chile se quedó en esa ciudad hasta la fecha, con una diferencia de radical importancia: a partir de 1997, los Campeonatos se realizan en una medialuna de hormigón armado y con capacidad para 12 mil espectadores, recinto que tuvo una inversión de 3 millones de dólares y cuyo entorno preserva el estilo campesino.
Este moderno escenario permite la realización de todo tipo de espectáculos artísticos y de otros deportes, como el tenis. En la actual medialuna monumental, Marcelo Ríos hizo uno de sus partidos de despedida frente al croata Goran Ivanicevic y se jugó el match de Copa Davis entre Chile y Eslovaquia, en febrero de 2006.
Desde la primera temporada oficial de rodeos en 1948, los Campeonatos Nacionales han experimentado diversos cambios de todo tipo, especialmente en cuanto a modernización. De partida, el transporte del ganado y de la caballada se hacía en ferrocarril desde el sur y norte hacia las ciudades sedes, las que se engalanaban como si se tratase de las Fiestas Patrias. Muchos dueños de casa pintaban los frontis de ellas y adquirían trajes nuevos para asistir a las corridas, ya que era “la fiesta” del pueblo.
En sus 61 años de existencia, el Champion de Chile sigue constituyéndose en el reencuentro de amigos del mundo rural y campesino que por las distancias no tienen la oportunidad de verse muy a menudo. Por ello, esta instancia que se da una vez al año tiene un alto contenido social y de camaradería, formándose incontables grupos no sólo en las tribunas sino en los casinos del recinto donde se producen grandes y alegres tertulias, como ocurría antiguamente en el campo.
De ser la fiesta de los campos, el rodeo se instaló en las ciudades y logró que la comunidad de cada pueblo se impregnase de lo que son las auténticas tradiciones campesinas mantenidas incólumes por los huasos, su vestimenta, el caballo criollo y por las corridas, que no son más que la derivación de una faena rural que se inició en la época de la Colonia con el marcaje de los animales.
En la actualidad, la sola palabra rodeo origina una atracción espontánea para los habitantes de la ciudad sede e incluso para jóvenes de lugares más apartados. Con motivo de los Campeonatos Nacionales en Rancagua, grupos de muchachos alquilan buses para viajar desde Santiago la noche del sábado al tradicional “baile”, el cual siempre es animado por populares artistas y conjuntos.
En los 61 años de desarrollo de los Campeonatos Nacionales, la Federación de Rodeo ha sido particularmente generosa con otras disciplinas deportivas y ha rendido tributo a quienes le han dado éxitos al país. Por las medialunas donde se han realizado Champions de Chile, ha recibido el aplauso del mundo corralero el vicecampeón olímpico de equitación en Helsinki, Oscar Cristo; quien fue y mantiene el record mundial de salto de a caballo, el coronel Oscar Laraguibel; el campeón mundial de tiro al vuelo Juan Enrique Lira y más recientemente el tenista Fernando González cuando ingresó a los top ten.
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