LEA: Desde el jardín

29 Marzo 2008
Una obra rarisima, quizás seria, quizás paródica, quizás comprensiva o quizás burlezca. Esta semana una novela de Jersy Kosinski y la historia de un jardinero cuyo nombre lo dice todo: Chance, posibilidad en inglés.
Simón Ergas >
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¿A alguien más se le repite esa coincidencia que cuando oímos sobre algo nuevo, como una palabra, se repite muchas veces durante un periodo? Eso me pasó con un libro. Mucha gente me comentó Desde el jardín, todos recordaban el libro con gusto y simpleza, todos aun lo saboreaban, pero nadie se acordaba ni del autor (Jerzy Kosinski, en la foto) ni de algún episodio de la trama. Cuando me contaban de qué se trataba me decían de un tipo que pasó de jardinero a presidente de los Estados Unidos por puras casualidades. Nunca me imaginé cuáles azares podían aparecer en esa historia y como nadie se acordaba de lo que pasaba, decidí leer el libro por curiosidad.

Así fue como conocí a Chance, el protagonista del libro. Un jardinero que no conocía nada del mundo. Había nacido en una casa como empleado y había jardineado toda su vida, sin sueldo, solamente recibiendo techo y comida. Estaba anclado ahí, encerrado, con una pequeña ventana al mundo que no lo mostraba como es: la televisión. Chance era feliz, su vida era su jardín y su televisión. Cuando el dueño de la casa con el jardín, quien había mantenido a Chance toda su vida, muere, todos deben abandonar. Chance toma sus maletas y sale al mundo. Son casualidades las que lo llevan en el primer momento a relacionarse con la clase poderosa de Estados Unidos, pero no es precisamente el aspecto que desarrollará en esta historia. Lo central es el carácter del jardinero, que es lo que lo llevará a ascender estratos y a lanzarse en una carrera política.

Si recordamos, Chance sólo conoce el mundo a través de la televisión. Todas las decisiones de cómo comportarse en cada situación las extrae del único ejemplo de sociedad que ha tenido en su vida, logrando así demostrar ser muy correcto. Por otro lado, su único conocimiento real del mundo es el cuidado de la naturaleza y el proceder de las plantas, entonces cada vez que alguien le pide su opinión , solamente cuenta algo que solía suceder en su jardín, como por ejemplo, que las hojas se caen de los árboles en otoño. He aquí la crítica del libro hacia la sociedad norteamericana, mostrando cómo es la misma clase dominante la que se engaña a sí misma. Chance no quiso engañar a nadie, pero fueron los mismos políticos los que interpretaban metáforas en las palabras de un jardinero.

Las obras más agradables de leer, las que más nos envuelven, son esas que mantienen cierta coherencia entre forma y contenido. Desde el jardín es una de esas. El lenguaje es delicado y lento, pero no despacio, no que no cuenta las cosas que pasan, sino que se trasmiten las ideas con paciencia, como si de cultivar un jardín se tratara.

Hay una película, pero comienze por el libro, es corto, liviano, pero lleno de un contenido crítico y una trama sorprendente. LÉAlo.


 
 
 
 
 
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