Esta multifacética banda liderada por el inglés Jay Kay lanza su primer disco por el año 93. Lo que siguen son nuevas producciones con un ascenso exponencial en las ventas y la recepción crítica, para alcanzar el clímax en el 96 con su disco “Travelling without moving”, en él la banda se caracterizaba por su manejo de la electrónica y el jazz, y por ese entonces incidencias del funk, así como un marcado contenido social en algunas canciones. El estilo con el que se clasifica a Jamiroquai, y especialmente por estos años, es el de acid jazz que obedece a la conjunción del funk, soul y jazz.

Sin embargo, años después la influencia del funk en su música se vería acrecentada, luego de cambiar al bajista, la banda se lanza con su quinto álbum “A Funk Oddysey”. En este se ven claros cambios de estilo, y resulta a mi juicio el disco más contundente de la banda. Con canciones de diversos tipos como electrónica, jazz e incluso temas con claros matices de bossa nova.

El disco abre con el tema electrónico “Feel so good”, pero este tema no resulta representativo ya que el resto de las canciones, si bien todas con un notorio sonido electrónico, resultan más cercanas al funk. Hay que señalar que puede parecer difícil o confuso distinguir el clásico sonido de la música funk en varios de estos temas, esto principalmente por el sonido electrónico del disco. También encontramos algunas baladas como son las canciones “Corner of the earth” o “Black crow” que dan cuenta de la hibridez del disco.

Un buen disco de esta buena banda, quizás su mejor presentación. A continuación dos canciones del disco:

Little L:

You give me something:

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