Hollyweed: Festival de cine sicoactivo

La revista Cañamo emprendió un proyecto ambicioso: organizar el primer festival internacional de cine sicoactivo. ¿Qué quiere decir esto? Presentar un conjunto de materiales audiovisuales, ya sean animaciones, documentales o películas de ficción sobre las drogas.

La Pollera asistió a la premiación, evento que cerró Hollyweed el 11 de noviembre pasado. En el Cine Arte Alameda fue la convocatoria. A la entrada, además de sopaipillas y empanadas, se estaban vendiendo productos derivados de la cannabis, pero sin THC, que es lo que no le gusta a las autoridades. Así usted podía llevar rarezas como un aceite, una galleta o un shampoo.

La premiación se desarrolló en la sala de cine. Habían algunos profesores de algunas universidades y alguna gente de la tele, una actriz de Los Venegas y un ex notero de CQC. Dijeron que había venido un ícono de las drogas de los 60, John Sinclair, quien se fue preso por regalar un porro a un policía encubierto y se organizó un concierto masivo por su libertad. ¿Alguien ha oído John Sinclair de John Lennon? Pero el hombre no se apareció en la premiación.

El premio: el san pedro de plata, símbolo de lo sicoactivo propio de nuestro país que a la vez juega con la idea del oscar cinematográfico. Se premiaron películas y documentales holandeses y brasileros, entre otros. Películas dramáticas que mostraban el desgarramiento de enfermos de cáncer, por ejemplo, a quienes la policía quitó su medicina. La sensación la retrató Lennon en su canción: "Let him be, set him free. Let him be, like you and me". ¿Por qué un cualquiera debe decidir de esa manera en la vida de la gente?

La única creación nacional premiada fue en la categoría de animación. El artista y corresponsal de La Pollera, José Benmayor, obtuvo el san pedro de plata por su obra Ayahuasca, donde se retrata la experiencia introspectiva de esta droga amazónica: un viaje a través del mal, del bien y de lo más hondo del propio ser. A continuación los dejamos con la animación, ponga pantalla completa y súmase en ese mundo de irrealidades concretas e infinitas: