Sí, fui uno de los afortunados que escuchó a última hora y por medio de una radioemisora local escuchó la noticia de que se realizaría una actividad cultural en la ex-hostería de Machalí, en la cual escucharíamos entre otros a un grupo Mapuche; a la agrupación Alerce, del hospital regional, a un conjunto de música con raíces folklóricas y a 4 destacados payadores.
Llegué un poco tarde, es cierto, pero alcancé a ver la despedida de los orgullosos mapuches que permanecían en el escenario. Es claro que después de correr tanto para llegar, estaba algo distraído y empecé a consultar por la programación, me encontré con Luis Carreño, quien además de pertenecer al centro cultural, es un gran payador, éste me clarificó mis dudas.
La cueca me levantó el ánimo, las voces de la agrupación Alerce, con guitarras, tormentos, pandero y demás instrumentos avivaron la noche.
Se tocaron tres pies de cueca, los cuales fueron bailados por algunos asistentes, posteriormente tocaron otros temas y los aplausos acompañaron el momento en que saludaron despidiéndose del público.
Posteriormente un conjunto con grandes habilidades instrumentales fue quien nos entretuvo, lamentablemente la amplificación no los acompañó, pues su voz se perdía frente a la de los instrumentos.
Es importante señalar que cantaron varios poemas de Luis Carreño de su libro: "Por utopías y sueños" musicalizados, lo cual fue una de las cosas importantes de la presentación.
Solo la mala calidad del audio opacó a estos músicos.
Para finalizar y pasadas las once de la noche suben a escena Luis Carreño, Salvador Pérez (Salvita) y Gabriel Torres, quienes junto con presentarse, cantaron varios temas en homenaje a Víctor Jara, quien falleciera un día 16 de septiembre de 1973 a manos del régimen militar. Las canciones fueron cantadas por Gabriel, quien es un payador de Puente Alto.
Finalmente pudimos tener en escena a cuatro poetas, Juan Carlos Bustamante, original de Molina, Luis Carreño, quien hacía de local; Salvita Pérez, de Chancón y premiado recientemente por su aporte a nuestra cultura chilena y Gabriel Torres, quien trajo hasta su arpa chilena.
Después de las décimas de presentación, los artistas siguieron con varios brindis, para posteriormente mostrar sus habilidades con las respuestas el el llamado "banquillo", en el cual varios poetas le preguntan en verso y así mismo debe responder el payador, usando todo su ingenio.
Siguieron las décimas con pie forzado y unas cuecas a una, dos y cuatro razones, las cuales sorprendieron a los asistentes que desconocían esta maravilla del arte popular.
Finalmente los poetas hicieron las décimas de despedida, para así terminar el espectáculo entre aplausos a las 00:30 horas del martes.
Sinceramente fue un agrado ver a Salvita más recuperado después de su enfermedad.
Así al final todos nos fuimos a la casa respectiva con la más grata impersión del Centro Cultural Machalí Renace.